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Los diamantes son una de las joyas preciosas más buscadas, pero para hacer una buena elección primero debes conocer sus principales características. Te contamos cuáles son…
Los diamantes siempre son una buena opción para regalar a una persona especial. Es un detalle clásico y elegante. Es por eso que el diamante se considera una de las joyas preciosas por excelencia en el mundo de la joyería.
Sin embargo, no todas las personas conocen bien los diamantes y sus características… En este artículo vamos a contarte cuáles son las principales características de un diamante, cómo se pueden clasificar y otros aspectos importantes que debes conocer si has pensado en comprar un diamante próximamente.
Toma nota y asegúrate de no fallar en la elección de tu diamante favorito.
Qué es un diamante
Primero que todo es fundamental que tengas claro qué es un diamante para
saber diferenciarlo del resto de piedras preciosas o semipreciosas.
Efectivamente, como hemos mencionado anteriormente, un diamante es una piedra preciosa y el mineral más duro que existe en nuestra naturaleza. Esto es la principal causa de su peculiaridad y lo que lo convierte en una de las joyas más demandadas y cotizadas en el mundo de la joyería.
Cómo se mide la calidad de un diamante: las 4 Cs
Nunca está demás aclarar que no todos los diamantes son iguales. Seguro que ya sabías esto, pero ¿Realmente sabes cuáles son los criterios por los que se distinguen? ¿Sabes cuáles son sus principales características?
Seguro que esto te interesa si has pensado en comprar un diamante en los próximos días o eres un habitual consumidor de joyas. No te preocupes porque si no eres todavía un experto en gemología en este artículo encontrarás algunos conceptos que te serán de gran ayuda en tu próxima compra.
Primero que todo necesitamos aclarar qué son las 4 Cs. Es sencillo, se trata de una forma popular de denominar a los cuatro criterios de calidad de un diamante. Estas características son: Carat (Peso/Quilates), Colour (Color), Clarity (Pureza) y Cut (Talla o Corte). Sus siglas en inglés son 4 Cs y de ahí el origen de su denominación.
Ahora bien, veamos el peso que tienen cada una de estas características a la hora de definir la calidad de un diamante y por consecuencia su precio.
Peso (Carat)
El peso de los diamantes se mide en quilates (ct). - 1ct equivale a 0,2 gramos.
Principalmente los diamantes se comercializan a precio por quilate, es decir cuánto mayor es su peso, mayor es su precio. Aunque no solo depende de esto.
En este punto es importante tener en cuenta que el peso de un diamante debe ser acorde a su medida. Esto nos indica que la talla es de calidad.
Color (Colour)
Posiblemente el color sea una de las características más importantes a la hora de escoger un diamante, ya no solo porque sea más afín a nuestro gusto sino porque es un claro determinante de su calidad.
Es importante que sepas que un diamante cuanto más incoloro es, se considera más bonito y valioso, además de escaso. Para determinar la transparencia o la claridad de un diamante se utiliza una escala establecida por el GIA (Gemological Institute of America) que se utiliza internacionalmente. En dicha escala, se establecen una serie de colores ordenador con letras desde la D hasta al Z siendo la D el color más transparente y Z el tono más amarillento o marrón, que indica que es de menor calidad.
Además de esta escala estándar, también existen diamantes de otros colores (rojo, azul, verde etc.) son los denominados “diamantes de fantasía”. En este caso, los criterios que se siguen son diferentes. Cuando el tono es poco frecuente y mayor es su intensidad, se considera que el diamante es de mejor calidad y por tanto su precio aumenta. Los diamantes de fantasía son los más valiosos, los más exclusivos y por tanto los más caros.
Claridad o Pureza (Clarity)
Cuando hablamos de impurezas en los diamantes nos referimos a aquellos “desperfectos” que puedan tener visiblemente como pequeñas motas llamadas inclusiones. Para poder ver y clasificar la pureza de un diamante también existe una escala que denomina con las siglas FL (Flawless) a el diamante más puro y con I3 a aquel diamante en el que las inclusiones son muy visibles y por tanto su pureza es muy baja.
A parte de estos dos extremos existen otros niveles:
- VVS: (Very Very Small Inclusions)
- VS: (Very Small Inclusions)
- SI: (Small Inclusions)
Estos serían los niveles intermedios, cada uno de ellos tienen dentro otros dos subniveles. Hay que tener en cuenta que las imperfecciones de un diamante se analizan con lupas de hasta diez aumentos, por tanto se considera que son muy pequeñas o muy muy pequeñas dependiendo del aumento necesario para apreciar la inclusión.
Talla o Corte (Cut)
La importancia de esta característica puede que sea porque es la única en la que interviene el factor humano y por tanto depende de su actividad. Cuando hablamos de la talla de un diamante nos referimos a la forma en la que está cortado y la calidad de este trabajo.
La calidad de talla nos hará apreciar cuál es el brillo del diamante y por tanto su calidad. Si un diamante no tiene las proporciones correctas después de ser tallado, no podrá sacar todo su brillo ya que la luz no se refleja en él de la misma forma, por lo tanto su valor se devalúa. A la hora de valorar la talla del diamante, también se tiene en cuanto su forma original y su peso bruto.
Ahora que ya conoces cuáles son los criterios de calidad de un diamante, es importante que sepas que no hay una característica única por la que podamos guiarnos, si no que hay que tenerlas todas en cuenta para definir correctamente si es un diamante de calidad o no.
Si todavía tienes más dudas acerca de cómo escoger un diamante para tí o para una persona especial en Pedro Rodriguez Joyeros estaremos encantados de recibirte en nuestra tienda para asesorarte.
Nuestro equipo cuenta con una amplia experiencia en el sector de las joyas y los diamantes. Contamos con grandes profesionales que seleccionan uno a uno cada diamante que exponemos. Nuestro objetivo es poder dar a nuestros clientes la mejor relación calidad precio.
